Un trago de Fuser, sobre dos rocas de Bohemía, con tres gotas de Utopía...

Agitado, no revuelto…

lunes, 28 de abril de 2008

Ninfómana Soledad. (Acción Libertadora...)


Ninfómana Soledad, allí apareces con tus pesadas cadenas,
allí apareces con todas esas emanaciones
que nos inundan de sensaciones...

Pesada Soledad allí estás de nuevo
con tu daga hiriente y espeluznante,
dolorosa como mil clavos,
urticante como mil cicatrices.

Burlona Soledad, allí te muestras con tu sonrrisa macabra
toda tu estupidez, toda tu ignorancia.

Incómoda Soledad, a quién te dispones a atacar
con tu veneno de fuego y tu lengua de ácido.



Necia Soledad, estúpida Soledad que piensas hacer ahora:
escupirme, vaciarme, idiotizarme, ignorarme, enajenarme, alienarme, embriagarme, extraviarme...
Ya todo eso lo has hecho antes...

Lúgubre Soledad, oscura como las tinieblas,
aquí estoy dispuesto a enfrentarte
dispuesto a doblegarte.

Luz de Lombardo, Daga de Longinus,
Buho de Atenea, Lanza de Quijote...

Ninfómana Soledad, te condeno al destierro eterno...
Ninfómana Soledad, vuelve a las tierras de la oscuridad
y el olvido perpétuo...
¡Ninfómana Soledad, yo te conjuro!

Soy.

viernes, 25 de abril de 2008

Llueve.

El tintineo de tus gotas me despiertan
tu frío al alba me llevan a levantar
esta pesada osamenta soñadora
que a pesar que deslumbre la aurora
los ojos no quieren mirar.

Dando tumbos se aproxima
a ese lugar donde todos son humanos
que por mas que cubran sus manos
siempre habrá algo que tocar.

Un poco de café...

Calle húmeda,
húmedo tránsito,
humedo viento,
húmedo rostro,
mañana húmeda.

Camino con nuevos lentes
al mirar bajo tu cabellera
distorcionando caras y gentes
que tontos, ninguno te mira.

Bulliciosas mesas, todos huyen, todos gritan,
nadie quiere sentir, tu caricia madre lluvia.

Veo los arboles, húmedos, empapados...
Oigo los gemidos de querubines emplumados,
será que tampoco te desean,
será que tampoco quiren sentir
como recorres sus plumas...

Olor a savia, olor a vida...
olor a Pachamama bañada de ti...
Las dos amantes.
Las dos madres.

Y al no soportar, tanto amor en el ambiente
no pude hacer mejor cosa que dar un paso al frente
y sumergirme, empaparme, llenarme, beberme en ti.
Oh, madre lluvia, tu hijo ya está aquí.

miércoles, 23 de abril de 2008

Dolor...



A veces me pregunto si soy demasiado masoquista
o si es que me gusta reirme del mundo y sus inconsecuencias
que paso a paso en esta realidad que se transita
me deja el sabor agridulce de sus incongruencias.




Hoy deperté divinamente adolorido
porque de nuevo me encontré tránsido
de una nueva y bárbara sensación
que paso a paso a mi corazón
le producía una agradable desazón.





Coloqué mi pretina más abajo que de habitual
para poder disfrutar de esa mezcla de picardía
que el roce a mi zona pubiana producía
porque claro, no es para nada normal
que con un dolor nada mal
a cada paso te haga mía cada día.




Pienso y repienso a cada paso, paso a paso
esas cadencias pelvianas que en mi cuerpo
aquella última tarde noche de tu cuerpo
me llevaron a recibir ese último paso.



Hueso pelviano divino
de fémina amante en desatino
que aún hoy a mi cuerpo impío
inquieta y produce escalofrío.





Imaginacion desbordada
paso a paso, desde la alborada
calle a calle, acera a acera
que me erecta y desespera.








Por ahora aún es tiempo de disfrutarte,
hoy una tarde de veintitrés de abril
con pecho olor a hule y a añil,
ya habrá suficiente tiempo para extrañarte.

lunes, 21 de abril de 2008

Un mal sueño...


Una vez se citaron en un parque
dos pasos quizás tres o cuatro
y volvieron al mismo lugar de antaño
que por mas que pase un año y otro año
en el no hay lugar al pero ni al apero
porque en él sólo hay espacio al qué.

El, alguna vez volaba por los aires desafiando su humanidad.
Ella, desafiando a los suyos, quiso ser humana.
O quizás el cuento va al revés...
Aunque en realidad, entre angeles y demonios
no existe diferencia y tampoco el través...

En fin...

Y por algún momento en los aires sus alas se cruzaron.
El, de alas negras llenas de rebeldía a lo humano y a lo divino.
Ella, llena de sueños, de pasiones, de Utopías.

Un día, soplaron nuevos vientos,
vientos quizás producidos por la contaminación
vientos quizás producidos por una nueva explosión.

Arrastrados por los vientos fueron a dar a lugares distintos.
Arrastrados por los vientos conocieron nuevos lugares.
Arrastrados por los vientos vivieron nuevas vidas.

Un día, el de negras alas llenas de humo de fieros combates
vio tras una rama y la metralla una sombra en la tierra.
La de alas blancas dió dos vueltas sobre su cabeza
y se posó frente a el tránsida de miedo de desobediencia.

El, conciente de lo dificil que era amar en dos vientos
decidió poner fin a su inerme batallar.
Como buen rebelde arrancó sus alas y las ofrendó al amor,
prefiriendo andar como un humano más.

Y ella preguntó: ¿y si lo hago, quién me devolverá a mi hogar?

domingo, 20 de abril de 2008

Gracias...


11:05pm, dejo atrás tu boca, sé que fué el último beso... que rico... robado...

Gracias mi niña, sé que éste es el final de la historia más bonita que en mi vida podré tener. No importa nada ya... No importa lo dicho o lo hecho, importa lo que fué éste hoy...

Gracias por tu sonrisa, la de hacia arriba, la de hacia abajo... a todas las amo...

Gracias por nuestro último viaje, necesario era encontrar mi alma...

Gracias por nuestras últimas pláticas... estarán grabadas en mi mente con fuego...

Gracias por nuestra última cena, y disculpa por no haber pagado la cuenta...

Gracias por nuestras últimas bromas, necesitaba reir contigo...

Gracias por última vez disfrutarte vestir, y verte tan perfecta como siempre...

Gracias por ese último baño... Pero igual tu olor jamás se irá...

Gracias por todos esos orgasmos...

Gracias por la confesión... y gracias por haber confiado en mí...

Gracias por haberme catado por última vez...

Gracias por dejar amarnos con frenesí y locura... con todo... disculpa que no fué perfecta, sabes que me cuesta decir adios...

Gracias por ese paseo...

Gracias... aunque te suene irónico... por ésa nuestra última discusión...

Gracias por descansar en tus piernas...

Gracias... por ése beso... y por ése... y por todos...

Gracias por dejarme dar el primer beso...

Gracias por esperarte por última vez...

Gracías por amarme, gracias por permitir amarte...

Aunque sé que para tí ya todo es imposible...


Pero igual, gracias, por ésta, nuestra última vez...

lunes, 14 de abril de 2008

En La Punta de la Lengua. (mágico realismo)


Entregado a ninfas y a imágenes surrealistas, partes de mi corta muerte de cada día, estoy. El humo de un cigarro que pocas veces te ví fumar, me conduce a otro cuadro digno de Dalí.

Sentada en ésa misma silla negra donde tantas veces jugamos te hallé, imagen espectral en technicolor otra vez, iluminada por la punta flamígera cual faro entre la bruma de tus bocanadas, que avanzando en su danza etérea logran atraparme, exiliándome de la realidad para ser de nuevo esclavo de tu ser... de tus deseos... de tu piel...

Víctima de mis captoras, fuí levitando hasta tu encuentro, y tropecé súbitamente con tu aliento, mezcla de tabaco y lujuria. Mi espina se eriza producto del reconocimiento de encontrarme de nuevo ante tí.

Entregado a tus fauces de pronto me veo, ultrajado por mil y diez mil lenguas que surcan mi piel, cientos de colmillos y dientes intentan devorarme, trato de resistirme y se me hace imposible.

De pronto, tu sed de piel se detiene, y siento llegar hasta mi rostro las emanaciones de tu cáliz. Ya no había dudas: se trataba de tí.

Al saber de tus gustos y tus debilidades, fuí implacable al ir al contrataque, surcando cada relieve de tus circunvalaciones auditivas, recordando lo que ésto produce en tí.

Convertí mi lengua de nuevo en mi arma secreta....

Recorrí cada reducto de tu piel lengua al ristre, sometiendo a mi dominio cada lugar en el que se hubiese borrado mi olor, mi saliva, mi piel...

Monté parapeto en tu cuello, y sometí a sitio tu pecho de sabana juvenil, venganza lasciva de tu ataque matutino de cada día al encontrar en el mío tu mezcla de hule y añil. Me volví guerrillero de tu abdomen, tus nalgas y entrepiernas, asestando golpes arteros en cada uno de tus puntos vulnerables de éxtasis y placer...

Para luego al final tocar el paso redoblado de ataque, y que cientos de golpes de mi lengua cuales flechas llegasen a tu cuartel general. Desplazé escuadrones de caballería de lamidas a la derecha y batallones de infantería de mordidas a la izquierda, para concentrar mi ataque de artillería en ese pequeño punto erecto sólo para mí...

Claro que opusiste resistencia: balaceras de revuelcos, bombas de gemidos y comandos especiales de arañazos... Pero igual sucumbiste a mi fulminante estrategia...

¿Y te preguntas por el botín de esta batalla? Libar de tus entrañas fué el tesoro, nectar de miel y encaje, olor de azahar, dulzura digna de todo buen Muhaydín...

De tal alcance fué mi victoria, que al día siguiente al despertar y entregar mi cuerpo a las curas de la ducha, a mi boca no lavé, para así durante todo el día disfrutar de ese nectar que capturé de tí.


Y así poder a placer planear esta guerra nuestra que de seguro ha de continuar, cuando entre gallos y madrugada estés
en la punta de mi lengua


otra vez...

sábado, 12 de abril de 2008

Fumando un poco...

Lentamente sale el paquete de rollings de mi chaqueta... y se coloca en la barra... se despliega uno en la madera y los otros regresan a su guarida en el bolsillo izquierdo... del derecho sale un poco del tabaco que trata de esconder aquello... Qué puedo hacer señores, aún me queda un poco de la depreción del matutino diario de hule y añil... Yo no juzgo a los maricos que se dan de besos en las barras, ni a las amantes que salen corriendo cuando se dan cuenta que la cosa es un poco más complicada que nada, ni a los amigos que te forman peos porque estés más depre que a diario...

Un nuevo sorbo de ginebra para acallar las ideas... procedo a liar... operación que hasta hace tres meses no hacía desde el liceo, pero en la que aún sigo siendo bueno... le arranco chispas a mi yezca...
y una bocanada profunda...


para acallar la ausencia...

Un relajación circula por mis miembros y mi saliva se hace ligera... Ya el ruido de chicas que charlan en la barra ni la de los tipos en la mesa cercana me molestan... Ya sólo quedamos Fuser y sus ideas... Una bocanada y un nuevo sorbo de ginebra... para invocar estrategias que me liberen de estas cargas, de estas contradicciones, de estos errores, de estas penas...

Un tatuaje fraccionado en historias pasa por frente del que escribe y dice: -No tendrás un poco para mí también... Le doy la poca que me queda para desembarsármela al momento... No estoy para niñas jugando a ser hembras...

Unas musas que salen de un amigo de barras, viejo conocido poeta que dormía la borrachera, me vienen a contar de una mujer de humo, y que tenga cuidado con ella... Les cuento de mi inquilina incrustada en mis selvas, riéndome así de ellas... Una que me daba de vueltas, entra de pronto en mi mente, así que no le echen la culpa al porro, echénsela a...

De pronto todo se oscurece. La barra, las mesas, la chillona gente, todo desaparece. Surge una carrubia cortina... De improviso sale una mujer de ella, alta y esbelta, fumando un cigarrillo en boquilla... Y acercándose a mi delirio dice...

-Fuser, niño-hombre, paseante de bares y burdeles, ratón de acera y de biblioteca, bohemio no es necesario que me cuentes de la pena que te embargue. Vengo a que me dibujes en versos con el rostro que prefieras...

Subo la mirada y veo, y aunque no lo quiera decir tendré que hacerlo, de nuevo aquElla que cada mañana toma mi mente como madriguera, y que de mi pecho y su pelambre vuelve su olor embriagante...

-Siéntate, oh mujer de recuerdos -le digo-, de ellos el más extasiante, déjame dibujarte con versos profanos, de aquellos que no tienen reparos, de esos que por más que busques en mansiones o chiqueros no encontrarás en ninguna parte... Déjame pintarte con olores nuevos viejos que a mi mente tomen por asalto, que entre mi arameo y mi esperanto, no encontrarás desplante... Déjame soñarte por un momento, bohemia niña-mujer por un instante... Y ya que entre congojas te hallas, y que por eso tu ser no para en buscarme... Deja que tus ojos me lean y que en ellos me halles...

Y me dispuse a pintar con palabras los versos de mi solicitante, entre tragos y bocanadas, entre tintas y pesares... Pero no pesares de tristeza, de esos no me embargan, porque cuando le abres la jaula a los amores, debes dejar que ellos de nuevo te hallen... Pesares si naturales de la ausencia, así que no me pidan que no extrañe, ni que unas lagrimas de vez en cuando derrame por aquElla la de largas piernas y fino traje, la única que ha sabido en mis locuras extraviarse, y que de pasos perdidos bien supo sacarme... No, no pueden ser pesares de tristeza; sí, tienen que ser naturales, porque cuando no lloras de tristeza ésta no puede encontrase... Sería contradictorio pensar que la tristeza pueda a mi arroparme si tu recuerdo me alumbra entre tantos pesares...

Y entre escribir y escribir, el olor a azahar se fué presentando, y mi esperanto se fue haciendo mas intenso y mi arameo mas desgarrado. No lo pude dudar entonces, de nuevo estaba pasando, tu ser y el mio otra vez se conjugaban, en extraña complicidad, y de nuevo nos desafiaban...


¿Y tú, qué esperas...?